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El concepto del edge computing móvil

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El edge computing móvil es un tipo de arquitectura de red que proporciona las funciones del cloud computing y un entorno de servicios de TI en el extremo de la red. Este concepto a veces se utiliza como sinónimo del edge computing multiacceso o MEC. El objetivo de ambos tipos de edge computing es reducir la latencia, garantizar el funcionamiento eficiente de la red y mejorar la experiencia de los clientes.

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El edge computing móvil y el concepto relacionado de edge computing multiacceso (MEC) describen una evolución del cloud computing que utiliza la tecnología móvil, los servicios de nube y el edge computing para aislar los hosts de aplicaciones del centro de datos donde se encuentran y trasladarlos hacia el extremo de la red. Esto no solo permite que los usuarios finales estén más cerca de las aplicaciones, sino también que los servicios informáticos estén más cerca de los datos que ellas generan.

El concepto del edge computing acerca la función informática al usuario de los datos con el objetivo de brindar un rendimiento más flexible, reducir la carga de la red y agilizar la transmisión de los datos. El edge computing móvil lleva estos objetivos un paso más adelante, ya que ofrece una latencia ultrabaja y un gran ancho de banda, junto con información de la red de radio y datos que las aplicaciones pueden usar inmediatamente.

A medida que la tecnología informática continúa extendiéndose a los dispositivos conectados y no se limita al centro de datos y el escritorio, el edge computing móvil tiene gran importancia en la arquitectura empresarial.

El término 5G se refiere a la quinta generación de las redes móviles, la cual incluye actualizaciones en el ancho de banda y en la latencia que permiten usar ciertos servicios que antes no era posible. Las redes de este tipo prometen velocidades de transmisión de datos de hasta 10 Gbps, una latencia muy reducida y una mayor cobertura en zonas remotas.

La tecnología 5G se considera un caso práctico de edge computing y también posibilita otros casos en el extremo de la red. El edge computing no solo permite cumplir con los requisitos de rendimiento y baja latencia de las redes 5G, sino que también mejora la experiencia de los clientes.

A medida que los proveedores de servicios de telecomunicaciones modernizan sus redes y buscan nuevas fuentes de ingresos, y los clientes buscan ofrecer nuevos servicios, la adopción del edge computing se vuelve una prioridad para ellos. En concreto, muchos proveedores trasladan las cargas de trabajo y los servicios desde la red central en los centros de datos hacia el extremo, es decir, hacia los puntos de presencia y las oficinas centrales.

Las aplicaciones y los servicios que los clientes de las empresas de telecomunicaciones desean diseñar y utilizar en las redes del extremo pueden ser fundamentales para generar ingresos. Sin embargo, el éxito depende de la creación del ecosistema adecuado y de la coordinación entre las partes interesadas y los partners tecnológicos. Con el fin de mantenerse competitivas, las empresas de telecomunicaciones deben adaptarse para simplificar las operaciones de red y mejorar la flexibilidad, la disponibilidad y la eficiencia, mientras prestan sus servicios a una cantidad cada vez mayor de dispositivos y aplicaciones que consumen un gran ancho de banda en el extremo de la red.

Se trata de una infraestructura de nube definida por software y muy resistente, la cual permite que los proveedores de telecomunicaciones agilicen la incorporación de servicios, respondan más rápido a los cambios en la demanda y gestionen los recursos desde un solo lugar y con mayor eficiencia. Es uno de los elementos fundamentales para transformar una empresa de telecomunicaciones en un proveedor de servicios digitales.

Las primeras nubes para las telecomunicaciones aplicaban los conceptos de la virtualización del centro de datos a la red. Con la llegada de la tecnología 5G, incorporan tecnologías más modernas, como los contenedores, los microservicios y las arquitecturas de nube híbrida. Durante la transición, los contenedores y los microservicios deberán coexistir con las antiguas funciones de red virtualizadas (VNF) que se ejecutan en la actualidad, como el núcleo de paquetes evolucionado (EPC), las redes definidas por software en una red de área amplia (SD-WAN) y las tecnologías de seguridad.

El Internet de las cosas (IoT) es el proceso que permite conectar los elementos físicos cotidianos al Internet: desde los objetos domésticos comunes, como las bombillas de luz, hasta los recursos para la atención de la salud, como los dispositivos médicos; las prendas y los accesorios personales inteligentes; e incluso los sistemas de las ciudades inteligentes.

El término IoT hace referencia a los sistemas de dispositivos físicos que reciben y transfieren datos a través de las redes inalámbricas, con poca intervención humana. Estos sistemas pueden contribuir con grandes cantidades de datos, y los beneficios y los desafíos que conllevan, a una implementación de edge computing móvil.

Un concepto relacionado es el IIoT, que significa Internet industrial de las cosas, y cubre los dispositivos conectados en la etapa de fabricación, la energía y otras prácticas industriales. Estos dispositivos suelen implementarse junto con el edge computing. El IIoT es sumamente importante para lograr un mayor nivel de automatización y autosupervisión en las máquinas industriales, lo cual permite mejorar la eficiencia. A medida que se extiende la conectividad móvil, los dispositivos de IoT e IIoT conectados cobran cada vez más importancia en las estrategias de edge computing.

El IoT genera una gran cantidad de datos que deben procesarse y analizarse para su uso. Por su parte, el edge computing acerca los servicios informáticos al usuario final o a la fuente de los datos, que puede ser un dispositivo de IoT.

Asimismo, es una fuente local de procesamiento y almacenamiento para los datos y las necesidades informáticas de los dispositivos de IoT, lo cual reduce la latencia en la comunicación entre los dispositivos y las redes centrales de TI a las que se conectan.

Gracias al edge computing, puede beneficiarse de las grandes cantidades de datos que generan los dispositivos de IoT conectados. Al implementar algoritmos de análisis y modelos de aprendizaje automático en el extremo de la red, los datos se procesan de forma local y pueden utilizarse para tomar decisiones rápidamente. Junto con el IoT, el edge computing móvil acerca las aplicaciones a los usuarios finales y los servicios informáticos a la ubicación donde se encuentran los datos útiles.

La virtualización de las funciones de red (NFV) se utiliza para virtualizar los servicios de red, como los enrutadores, los firewalls y los equilibradores de carga, que tradicionalmente se ejecutaban en el hardware propietario para que admitieran las redes móviles. Estos servicios se empaquetan como máquinas virtuales (VM) en el hardware básico, lo cual permite que los proveedores de servicios ejecuten sus redes en servidores estándares, en lugar de hacerlo en sistemas propietarios. Es uno de los principales elementos de la nube para las telecomunicaciones y está redefiniendo este sector.

Con la NFV, no necesita tener un hardware exclusivo para cada función de la red. Además, mejora la capacidad de adaptación y la agilidad, pues permite que los proveedores ofrezcan nuevos servicios y aplicaciones de red según se soliciten, sin necesidad de contar con recursos de hardware adicionales.

Los microservicios representan una forma de dividir las aplicaciones de software en elementos más pequeños e independientes entre sí. A diferencia del enfoque tradicional y monolítico de las aplicaciones, en el que todo se compila en una sola pieza, los microservicios son independientes y funcionan en conjunto para llevar a cabo las mismas tareas. 

Combine los microservicios con los contenedores para crear la base del desarrollo en la nube, que es compatible con los requisitos digitales modernos que brindan confiabilidad, seguridad, agilidad y capacidad de respuesta a las aplicaciones móviles. El desarrollo basado en microservicios posibilita la portabilidad de las cargas de trabajo, para que las aplicaciones funcionen sin inconvenientes a pesar de los límites de la nube, garanticen el uso eficiente de los recursos y ofrezcan experiencias uniformes.

Los microservicios y la tecnología móvil coinciden de varias maneras. Los microservicios amplían las funciones de las aplicaciones móviles y permiten que los usuarios interactúen con servicios que les resulten útiles. Además, el edge computing móvil proporciona un entorno de servicios de aplicaciones para los clientes de las empresas de telecomunicaciones en el extremo de la red móvil, más cerca de los usuarios móviles.

Las plataformas open source empresariales de Red Hat ayudan a los líderes de la TI a resolver los desafíos que enfrentan sus empresas en todas las plataformas, incluidas las que se encuentran en el extremo de la red. 

Con el edge computing móvil, los clientes pueden ampliar los servicios de las aplicaciones a las ubicaciones remotas y gestionar una red que tenga como prioridad la confiabilidad y la baja latencia con los entornos informáticos que se encuentren cerca de los usuarios móviles y fijos. A su vez, los proveedores de servicios digitales pueden responder las exigencias de sus clientes a medida que modernizan sus redes y buscan nuevas fuentes de ingresos.

Nuestras soluciones open source, como Red Hat® Enterprise Linux® y Red Hat OpenShift®, ayudan a respaldar los cambios en las redes centrales y los sistemas de soporte con simplicidad, flexibilidad, capacidad de ajuste y seguridad mejorada y, además, funcionan en todas las nubes públicas y el hardware informático pertinentes. Asimismo, trabajamos con un amplio ecosistema tecnológico y comunitario para satisfacer las necesidades de nuestros clientes y sus entornos únicos.

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