Nuevo look. Mismo Red Hat. Entonces, ¿qué es lo que cambiamos?

Los símbolos son importantes. Las personas los tienen en cuenta.

Su poder deriva de la cantidad de gente que los mira y percibe más o menos la misma idea. A veces sólo consiste en un nombre; otras, es más que eso: una historia, valores compartidos, un objetivo común, una manera de ser.

El logo de Red Hat está cambiando por primera vez en 19 años. Y aunque nuestro desafío sea fácil de describir, no dejar de ser complejo. ¿Cómo preservar las cualidades reconocibles y la reputación (y significado) de nuestra última marca y al mismo tiempo crear un logo renovado, fresco y con el que resulte fácil trabajar?

¿Cómo introducir cambios en el diseño que se identifiquen con el pasado, aprovechen el presente y nos posicionen adecuadamente para los próximos 20 años?

Red Hat eligió un enfoque progresivo para abordar algunos problemas bastante simples.

¿Dónde quedó el Shadowman?

Ésta fue sin duda la cuestión más difícil. El “Shadowman” —como se solía conocer cariñosamente a nuestro logo anterior— es un personaje. Los miembros de Red Hat entendían lo que simbolizaba —la lucha por nivelar el mercado tecnológico con el open source — y lo apoyaban. (Los antropólogos no dejarían de regodearse si observaran el apego que le tenemos, ¡hasta el punto de humanizarlo!). Pero más allá de Red Hat y quienes no nos conocen, analicemos al “Shadowman” seriamente. Tenía un aspecto siniestro que no daba la idea de apertura ni transparencia. Necesitábamos salir de las sombras.

El “Shadowman” fue nuestro símbolo durante casi dos décadas pero el emblema fundamental original de la compañía ha sido siempre el sombrero de color rojo. Lo mismo nos respondieron los miembros de Red Hat y nuestra comunidad, cuando los consultamos. Lo que importaba era el sombrero, no quién lo llevaba. Usar sólo el sombrero de fieltro también sirvió para resolver un montón de problemas que el antiguo logo complicaba: es más simple y se adecua a espacios pequeños (como los favicons). También facilita deducir el nombre de nuestra empresa —Red Hat significa sombrero rojo— por lo que podemos usar sólo el sombrero en una mayor cantidad de lugares. Y al no incluir el rostro debajo del sombrero, es más fácil añadir texto y diseñar un sistema de logo completo.

¿Cómo se escribe Red Hat?

Nuestro logo anterior no concordaba con el uso de mayúsculas y el espaciado adecuados de nuestro nombre: Red Hat. Esto provocaba gran confusión tanto dentro como fuera de la empresa. Era muy habitual corregir a las personas porque nuestro logo era literalmente inexacto respecto de nuestro nombre. Se trataba de un problema importante con una solución sencilla: separamos claramente ambas palabras mediante un espacio y les pusimos mayúscula inicial.

Ya no hay dudas: ¡es Red Hat!

¿Qué ocurre con la tipografía?

Durante años utilizamos dos tipos de fuentes: Overpass (abierta) e Interstate (propietaria). La realidad es que ninguna coincidía con nuestro logo. Eran buenas tipografías tomadas de la señalización de las carreteras de los EE. UU., pero también las utilizaban muchas marcas distintas. Deseábamos algo que pudiéramos considerar como propio y que reflejara fielmente nuestra marca y nuestra voz. 

Con este fin colaboramos con un diseñador tipográfico para crear una familia de tipografías open source: Red Hat Display y Red Hat Text. 

Nuestra nueva letra es sans serif geométrica inspirada en las mismas fuentes clásicas en las que se inspiraron Overpass e Interstate. El estilo Display posee trazos uniformes y espaciado reducido, con formas de letras altas y abiertas. El estilo Text tiene algunos retoques para facilitar la lectura prolongada: mayor contraste entre la letra mayúscula y la minúscula y entre las líneas finas y gruesas, un ancho reducido y un espaciado más generoso.

Juntas conforman una familia de tipografía abierta, flexible y fácil de leer que es toda nuestra.

Sí, toda nuestra, pero accesible por todos. 

El diseño abierto es importante en Red Hat. Tenemos una amplia trayectoria adquiriendo y liberando software, facilitando que todos puedan usarlo, aprender de él y mejorarlo. Y también compartimos otras cosas que creamos con el mismo espíritu. Creemos que si nos resuelve un problema a nosotros, también puede resultar útil para otros.

No se trata sólo de un logo, es un sistema de logo!

Nuestro nuevo logo forma parte de un sistema flexible que nos permite elegir la mejor opción en función del uso que le queremos dar, desde minúsculos íconos digitales y avatares hasta letreros para la oficina. El logo puede ubicarse vertical u horizontalmente y el texto “Red Hat” puede ser grande o pequeño.

El sistema de logo trasciende nuestro logo corporativo. Con él podemos unificar productos y servicios, dar a los equipos internos, proyectos y programas una apariencia uniforme y nítida, y podemos divertirnos con nuestra marca en formas que antes eran imposibles.

¿Es posible que el tono de rojo de Red Hat haya variado?

¡Qué vista de lince! Luego de nuestro logo, el color rojo es sin duda nuestra marca más distintiva. 

El color rojo “clásico” de Red Hat (PMS 1797 o #CC0000) no superaba las pruebas de contraste en fondos oscuros. Esto provocaba que a los lectores con agudeza visual limitada o nula les resultara difícil o casi imposible leerlo y hasta podía provocar fatiga ocular en los lectores con visión normal. Es por eso que hemos modificado nuestro rojo por un tono más claro y brillante (PMS 1788C o #EE0000) que conserva el espíritu del color original.

No es fácil percibir esta variación a menos que uno observe con detenimiento, pero representa un cambio rotundo al tratar de lograr que nuestra marca sea legible y accesible por todos nuestros públicos.

Lo invitamos a conocer más acerca de los detalles del proyecto y del camino que recorrimos hasta llegar al nuevo logo. Y cuando vean nuestro nuevo logo, tomen una foto y compártanla en Twitter con el hashtag #OpenBrandProject.