La resiliencia en el sector bancario: un atributo indispensable para la continuidad en la nueva realidad (Parte 2)

Como mencioné anteriormente, existe un nuevo entorno operativo empresarial —producto de un ecosistema de clientes cada vez más exigentes o de eventos externos— que requiere de distintos enfoques para comprender los desafíos, adaptarse, proyectar y concentrarse en la nueva normalidad. Además de los cambios que se observan en la forma en que los clientes interactúan con los bancos, la resistencia cultural interna al cambio también puede plantear un obstáculo. Las entidades bancarias han sabido apreciar la necesidad de poner en práctica nuevos enfoques operativos pero, a menudo, también han sido precavidas, en especial, al momento de crear un modelo que combine la nube, el centro de datos y el entorno local debido a los riesgos inherentes que eso conlleva.

La resiliencia que se logra en la nube híbrida

Durante años, los bancos utilizaron la nube para sistemas no críticos tales como el correo electrónico, la gestión de relaciones con los clientes y el desarrollo de aplicaciones. En cambio, la mayoría de las aplicaciones de transacciones críticas (como los depósitos y préstamos) han permanecido en su lugar debido a los riesgos de seguridad percibidos y al costo que implicaría modernizar estos sistemas. 

Esta situación se ve agravada porque, ante la independencia que ofrece la adopción de la nube, los bancos recurrieron a distintos proveedores y esto dio como resultado configuraciones aisladas y herramientas y procedimientos para el monitoreo, la orquestación y la gestión totalmente desarticulados. En consecuencia, tal como sucede con las soluciones locales parciales, ciertos proveedores de nubes se ven limitados al momento de satisfacer las necesidades del consumidor “a la carta” y son incapaces de sacar el máximo provecho del verdadero potencial transformador de los procesos y servicios operativos. 

Ya son muchas las empresas que realizan operaciones en la nube guiadas por la promesa de una comercialización más veloz de productos y servicios innovadores, con el objetivo de disminuir costos y mejorar la eficiencia operativa mediante procesos de desarrollo de aplicaciones modernos y flexibles que incorporan la seguridad y la resiliencia.

Una estrategia de nube híbrida aprovecha los controles bien enraizados del centro de datos y protege funciones empresariales específicas en una nube privada mientras confía otras a la escalabilidad de una infraestructura de nube pública no local e incluso a distintas nubes públicas. La arquitectura de una nube híbrida abierta combina nubes públicas y privadas —admitiendo cierto grado de portabilidad entre ambas— y ofrece la posibilidad de elegir qué datos, aplicaciones y servicios permanecen detrás de los firewalls corporativos, independientemente del proveedor. Los ventajas que se logran en términos de flexibilidad y poder de cómputo mejoran la eficiencia y la seguridad internas, disminuyen los costos y aumentan la agilidad necesaria para dar cabida a la futura evolución digital. 

Al poner en práctica los conceptos de la nube híbrida abierta (junto con los contenedores, los microservicios y las herramientas de desarrollo nativo de la nube inherentes a la estrategia empresarial) y al aplicarlos en más de una nube pública (es decir, una implementación multinube), las empresas pueden beneficiarse de contar con enfoques de diseño, desarrollo y mejora de aplicaciones superiores. La clave radica en desarrollar una estrategia única y más uniforme que acompañe fácilmente la capacidad del banco de cambiar de configuración y adaptarse a los requerimientos.

Perspectivas de desarrollo y operaciones coherentes: el futuro es abierto

La unificación de las plataformas de nube actúa como catalizador de la automatización eficaz, en especial, la implementación de conceptos de nube híbrida abierta que resuelven muchos de los desafíos inherentes. 

• La infraestructura y los recursos se combinan mediante un único conjunto de herramientas que aportan mayor visibilidad de las operaciones y automatizan la gestión del ciclo de vida de los recursos. 

• Los administradores pueden delegar tareas de automatización de manera controlada y auditable, centralizando la gestión de credenciales, el aprovisionamiento, la configuración y los flujos de control de políticas. 
• Se puede automatizar la aplicación y la ejecución de políticas para fortalecer la seguridad, el gobierno y el cumplimiento en todas las infraestructuras. Los administradores pueden mantenerse al día de las amenazas de seguridad que cambian constantemente a través de entornos de nube más seguros y conforme a las normas.
• Pueden simplificar procesos y automatizar tareas —tales como las solicitudes, el aprovisionamiento y el retiro de servicios— entre distintos entornos, reducir los tiempos de gestión y la necesidad de recursos. 
• Pueden utilizar herramientas de gestión y automatización comunes y fáciles de usar para incentivar la colaboración entre equipos. La tecnología emergente sirve de incentivo para una nueva generación de desarrolladores y talento tecnológico porque presenta la posibilidad de utilizar y poder implementar, en lugar de limitarse a escribir código desde cero. 

Con miras a alcanzar estos objetivos, Red Hat ha mantenido un enfoque de nube combinado unificado con una solución integral—basada en el desarrollo de la comunidad open source— que aporta capacidades y resiliencia a las operaciones. Las operaciones simplificadas trascienden el sistema operativo Linux y generan costos inferiores, mayor flexibilidad y escalabilidad. Además, cuando la empresa se opera y optimiza con el foco puesto en el cliente, mejoran también la información y el modelado.

Como miembro de la comunidad tecnológica bancaria y consciente de este avance radical hacia la banca abierta que amplía los mercados y admite el uso de las API como parte de una economía integrada, Red Hat se mantiene activo dentro de las organizaciones bancarias open source y contribuye a fomentar el uso entre ellas. 

Red Hat puede participar y participa de:

• FINOS – la comunidad FINtech Open Source, que hoy forma parte de la fundación LINUX foundation, en la cual Red Hat ostenta la membresía Gold
• BIAN – Banking Industry Architecture Network, un enfoque comunitario de cuyas décadas de trabajo acumulado en pos de la expansión continua dependen tanto los partners como el sector

¿Le interesa conocer Red Hat y la función que cumple para intensificar las capacidades y la resiliencia del sector bancario a través del desarrollo de la comunidad open source? Para conocer cómo Red Hat ayuda a los bancos, haga clic aquí.