Red Hat Enterprise Linux

Principalmente elegimos Red Hat Enterprise Linux por su confiabilidad y estabilidad. El entorno de Linux es mucho más estable que el de Microsoft Windows, y como nuestras aplicaciones más importantes de ese momento necesitaban uno que fuera solo de Linux, optamos por Red Hat Enterprise Linux.

RHEL nos permite implementar las aplicaciones actuales y las cargas de trabajo nuevas en todos los entornos virtualizados de nube híbrida y multicloud. Es uno de los SO disponibles más estables.

La solución nos ahorró mucho dinero en comparación con otros productos, como Solaris. Además, es una ventaja tener un solo sistema operativo en lugar de varios. En términos generales, el beneficio para la empresa es ahorrar dinero en comparación con otros sistemas operativos y tener gran estabilidad.

Sin dudas obtuvimos ROI en cuanto a la confiabilidad, la estabilidad, la seguridad y la facilidad de uso, entre otros aspectos. Los casos prácticos están disponibles.

Podríamos integrar cualquier solución de nube, virtualización, almacenamiento o software con el sistema RHEL de forma rápida y sencilla. Es mucho mejor que otros con los que ya hemos trabajado.

En la actualidad, Red Hat es nuestra solución principal, y también usamos Ansible, Horizon, OpenShift y Kubernetes como parte de nuestro entorno. Es ideal en cuanto a la integración y está totalmente incorporada con las demás, las cuales pasan a formar parte de una solución más grande que nos permite ahorrar tiempo. Es posible lograr los mismos resultados al diseñar elementos desde cero con el open source, pero llevaría mucho tiempo. Las implementaciones se vuelven sencillas y rápidas porque todo está integrado. Y está muy bien que sea así. Ahora solo necesitamos dos personas a cargo de toda la infraestructura.

Este enfoque de solución integrada nos permite alcanzar la excelencia operativa porque podemos estar al tanto de lo que diseña cada persona. Tenemos un registro del entorno e información sobre todos sus elementos, para mejorar la uniformidad, la capacidad de replicación y la flexibilidad, entre otros beneficios.

Nuestros gastos operativos se redujeron notablemente desde que usamos RHEL. Se trata de un valor superior al 10 %.

Red Hat Enterprise Linux nos permite trasladar las cargas de trabajo entre la nube y el centro de datos con facilidad, y es muy sencillo gestionar la capacidad de adaptación de este SO. Tan solo tenemos que ejecutar más instancias en función de la demanda y luego detenerlas cuando ya no las necesitamos. Esto significa que la flexibilidad de Red Hat Enterprise Linux no representa un problema con el proveedor de nube.

La flexibilidad de la plataforma es excelente. Con la incorporación de los entornos híbridos y la multicloud, podemos ampliar la capacidad de las cargas de trabajo o agregar otras nuevas con gran facilidad. Por lo general, incorporamos capacidad a las cargas de trabajo cuando necesitamos más recursos, como en los momentos de mucha actividad.

Me encanta que los administradores de servidores puedan usarlo con facilidad y que permita crear paquetes de correcciones en los servidores y ofrecer actualizaciones de forma sencilla con el software de Red Hat. Como no tenemos que gastar presupuesto en contratar especialistas para que se encarguen de la tarea, sino que usualmente podemos hacerla nosotros, ahorramos tiempo y dinero. Es un sistema operativo bastante simple que ofrece facilidad de aprendizaje y de uso.

Por los costos de las operaciones y los factores de capacidad de adaptación, la plataforma es una buena elección para obtener un mejor retorno sobre la inversión (ROI). El conjunto de funciones que ofrece, la compatibilidad con diversas aplicaciones, la facilidad con la que se implementan y el excelente nivel de soporte dan como resultado un buen ROI.

Red Hat Enterprise Linux es la solución a nuestra necesidad de automatización y de ejecución de contenedores. Es el sistema operativo open source disponible más estable. De alguna forma u otra, funciona en nuestros sistemas, los cuales pierden estabilidad si no ejecutamos Red Hat Enterprise Linux.

Sin dudas obtuvimos ROI. Desde luego que la automatización disminuye el tiempo que lleva implementar una tarea concreta y la cantidad de personal que se necesitaría para llevarla a cabo. Considero que se destaca en cuanto a la automatización, el tiempo de actividad y la disponibilidad.

La productividad y la eficiencia son las principales ventajas porque la solución automatiza las tareas y los procesos comunes. Todo esto es un beneficio para nuestra empresa.

Entre tantas herramientas que hemos utilizado, RHEL nos ayudó a mejorar la estrategia de seguridad. Tenemos el control de la empresa.
Usamos Satellite para gestionar la ejecución de parches y tener una cantidad limitada de repositorios. De este modo, ya no es necesario buscarlos en Internet, sino que pueden obtenerse mediante Satellite. También usamos el sistema para aplicar los parches. Utilizamos Ansible para que la automatización diseñe paquetes, instale los parches de seguridad en ellos y ejecute el análisis de puntos vulnerables. La plataforma lo pone en marcha y permite implementar IdM en los paquetes. Usamos Ansible en gran medida y también estamos dando los primeros pasos con OpenShift.

Estoy conforme con mi cuenta de desarrollador. Incluye dieciséis licencias sin costo que son espectaculares, ya que puedo seguir usándola en casa en vez de probar CentOS u otro sistema similar. Cuando CentOS desapareció o cambió, pude crearme la cuenta de desarrollador y poner en marcha todo mi laboratorio en Red Hat, algo que lo mejoró sin dudas, ya que lo usamos en el trabajo. Ahora tengo dos entornos iguales en lugar de tener uno real y un clon.

Antes usábamos CentOS. También probamos Oracle Linux, que se basa en el kernel de Red Hat Enterprise Linux, pero ahora tratamos de usar Red Hat Enterprise Linux rigurosamente. Migramos a este sistema operativo porque ofrece un soporte excelente. La solución nos ayudó a simplificar y optimizar la infraestructura para las aplicaciones o las bases de datos que ejecutamos en el sistema operativo Linux.

Ejecutamos la mayoría de las tareas en la solución, por lo que su impacto ha sido enorme. También usamos Ubuntu en algunas ocasiones, pero cuestionamos su uso. Teóricamente, Ubuntu está destinado a los aficionados, mientras que RHEL y CentOS están pensados para las entidades profesionales con seguridad reforzada.

Antes usaba CentOS, que está relacionado con Red Hat. Nuestro cliente decidió migrar a Red Hat. También utilicé Ubuntu, que es una solución open source con nivel bajo de seguridad y que, por lo tanto, no es recomendable para empresas de gran envergadura.

Usamos Ubuntu y SUSE. Principalmente, migramos a Red Hat por el soporte empresarial, la documentación y la integración de contenedores que nos brinda. Sin dudas recomiendo RHEL, ya que se adapta muy bien al desarrollo en la nube o en las instalaciones, sea la empresa pequeña o grande, y además es un producto profesional.

Nos encanta usar Red Hat Satellite. Tenemos 5000 servidores aproximadamente y gestionarlos por separado sería una pesadilla. Usé Red Hat Insights, que proporciona información sobre los eventos de cada máquina virtual (VM) de Red Hat que tenemos. Nos indica si el estado no es óptimo o si hay obstáculos en cuanto al rendimiento. Permite visualizar el estado de todo el sistema operativo.

Con Red Hat Enterprise Linux, pudimos concentrar el desarrollo en el entorno de nube híbrida, ya que es posible migrar los contenedores desde este sistema operativo a AWS.

Para nuestra empresa es fundamental contar con una solución que evite la dependencia de un solo proveedor. No queremos quedar vinculados a una sola opción, sino que buscamos la flexibilidad y la disponibilidad para descubrir otras.