Contenedores y máquinas virtuales
A medida que las exigencias de los desarrolladores de software se ajustan a las experiencias que ofrece la nube, los equipos de operaciones de TI y de ingeniería de plataformas se ven obligados a ofrecer más velocidad, agilidad, portabilidad y flexibilidad para satisfacer esas necesidades, pero sin poner en riesgo las funciones de seguridad y la supervisión requeridas. Si bien los clientes tienen la opción de ejecutar los contenedores en entornos de nube, en el extremo de la red o en servidores dedicados (bare metal) en las instalaciones, la mayoría de las infraestructuras modernas están virtualizadas. Hoy en día, la forma más sencilla y efectiva de comenzar a utilizar los contenedores es ejecutar las cargas de trabajo en ellos desde una plataforma de virtualización con servidores dedicados (bare metal).
Conceptos básicos de los contenedores
contenedores encapsulan una aplicación y sus dependencias, las aíslan del resto del sistema y garantizan la uniformidad en los entornos de desarrollo, pruebas y producción. Además, comparten el mismo kernel del sistema operativo y aíslan los procesos de las aplicaciones, lo que permite obtener cargas de trabajo ligeras y portátiles. De este modo, mejoran la agilidad en el desarrollo, aceleran la implementación y responden con rapidez a las necesidades empresariales.Por su parte,
Kubernetes se diseñó para automatizar la implementación, el ajuste y la gestión de los contenedores. Más de 88 000 colaboradores realizaron este software, de cuyo desarrollo e implementación se encargó una de las comunidades open source más grandes del mundo. Kubernetes también es la base de Red Hat® OpenShift®, una plataforma de nube integral que permite diseñar, implementar y ejecutar aplicaciones tradicionales y modernas.
Si es la primera vez que la utilizas, obtén más información sobre las ventajas y desventajas, y aprende a simplificar la gestión de sus implementaciones en las instalaciones o en la nube de la mano de OpenShift.
Los contenedores y las máquinas virtuales ofrecen distintos enfoques para empaquetar las aplicaciones y los entornos informáticos y aislarlos del resto del sistema. Pueden utilizarse en conjunto de diversas maneras, como con la virtualización propia de los contenedores, que permite ejecutar y gestionar las cargas de trabajo de las máquinas virtuales junto con las de los contenedores, o una sobre otra, según se explica a continuación.
Recursos de Red Hat
Motivos para ejecutar OpenShift en VMware
La ejecución de contenedores por medio de Red Hat OpenShift en VMware presenta una serie de ventajas. Un ejemplo es la gestión de recursos. En lugar de destinar los nodos de la infraestructura de servidor dedicado (bare metal) a tus cargas de trabajo en contenedores, puedes crear un clúster virtual rápidamente y, si necesitas más recursos, puedes ampliar los nodos de trabajo de manera sencilla. También puedes dar a cada usuario su propio clúster para ofrecerle un entorno multiempresa, limitado únicamente por los recursos de su clúster, y adaptarlo según sea necesario. Red Hat OpenShift integra automáticamente el plugin vSphere Container Storage, que simplifica la organización del almacenamiento mediante el uso de almacenes de datos locales de VMware para ofrecer una capacidad permanente.
Además, ofrece instalación automatizada, actualizaciones y gestión del ciclo de vida en toda la stack de contenedores, entre ellos el sistema operativo, las aplicaciones, Kubernetes y los servicios del clúster. Esto permite que los clientes reduzcan la complejidad operativa, ahorren tiempo y garanticen la uniformidad en todos los entornos. Red Hat OpenShift se centra principalmente en la seguridad en cada capa de la stack de contenedores y en todo el ciclo de vida de la aplicación, lo cual ayuda a los equipos a diseñar soluciones con rapidez, confianza, agilidad y flexibilidad. Red Hat no solo brinda una plataforma sumamente versátil, sino que también ofrece soporte empresarial a largo plazo para las versiones de OpenShift.
El funcionamiento de un entorno de Red Hat OpenShift con infraestructura virtualizada puede suponer una mejora con respecto a la gestión de la infraestructura de TI tradicional en un servidor dedicado (bare metal). Esto se debe a que la demanda de recursos suele variar en función de las necesidades de la empresa y, por lo tanto, la infraestructura tradicional puede provocar que los clústeres de Red Hat OpenShift no estén bien preparados. Una infraestructura virtualizada es más flexible, adaptable y segura para hacer frente a las exigencias cambiantes de la empresa y a las cargas de trabajo de las aplicaciones asociadas, ya que permite aumentar o reducir al instante la capacidad de un clúster de OpenShift en función de las distintas tareas, ya sea generando o eliminando nodos de trabajo virtuales adicionales.
Cualquiera que sea el lugar donde ejecute Red Hat OpenShift, funciona del mismo modo en soluciones VMware, en las instalaciones de un centro de datos local o en el extremo de la red.
Funcionamiento de Red Hat Openshift con VMware
Red Hat OpenShift se combinan a la perfección para ejecutar una plataforma de contenedores empresarial en una infraestructura virtual. Durante varios años, nuestros clientes en común implementaron con éxito Red Hat OpenShift en VMware para ejecutar sus aplicaciones basadas en contenedores listas para la producción.
Red Hat OpenShift en VMware Cloud Foundation
VMware Cloud Foundation reúne en una única plataforma funciones independientes del centro de datos (informática, almacenamiento, redes y gestión de la nube) y puede configurarse en una nube privada local o utilizarse como servicio en una nube pública. Cuando se combina con Red Hat OpenShift, líder en el uso de contenedores de Kubernetes para empresas, VMware Cloud Foundation mejora tu stack de desarrollo de aplicaciones a través de una plataforma segura, adaptable y ajustable. La implementación de Red Hat OpenShift en VCF proporciona un entorno sólido y centrado en la seguridad, que permite que los equipos diseñen, desarrollen y gestionen las aplicaciones en contenedores sin ningún inconveniente. VMware Cloud Foundation complementa esta característica con funciones de red avanzadas a través de VMware NSX, incluida la microsegmentación, que aísla las cargas de trabajo, reduce los riesgos de seguridad y optimiza la eficiencia de la red.
Gracias a esta combinación, las empresas pueden agilizar las operaciones, mejorar las medidas de seguridad y acelerar el desarrollo de aplicaciones en los entornos híbridos y multicloud.
VMware y Red Hat son partners de tecnología desde hace varios años. Red Hat ofrece la automatización integral de las implementaciones de vSphere con Red Hat OpenShift. Esto te permite controlar la preparación de la infraestructura mediante el uso de las prácticas recomendadas más adecuadas en Red Hat OpenShift, lo cual agiliza aún más la configuración inicial en vSphere.
Si deseas personalizar más las implementaciones, Red Hat ofrece un plan claro y con soporte sobre las infraestructuras actuales para que ejecutes las versiones locales de Red Hat OpenShift en implementaciones de nube híbrida con tus instancias de nube pública. También ofrece la instalación basada en agentes y el Assisted Installer, el cual es compatible con las distintas plataformas de implementación y se centra en las infraestructuras de servidores dedicados (bare metal) y vSphere.
El blog oficial de Red Hat
Obtenga la información más reciente sobre nuestro ecosistema de clientes, socios y comunidades.