Ninguno de estos valores es más importante que otro. La libertad sin responsabilidad puede terminar en caos. La valentía sin compromiso no lleva a ningún sitio. El compromiso sin libertad no tiene ningún sentido. La responsabilidad sin valentía no tiene razón de ser.
Para generar innovaciones y trabajar de manera armoniosa, necesitamos lograr un equilibrio entre nuestros valores. Eso es lo que nos permite cambiar constantemente y, a su vez, aferrarnos a un propósito más grande de mejora permanente.
Prestamos servicios a nuestros clientes, a la comunidad y a las partes interesadas. Todos están conectados y ninguno puede dejarse de lado.