Resumen
Cada vez es más común que las aplicaciones se diseñen como elementos individuales y funcionales que se pueden distribuir como contenedores. Esto significa que en cada una de ellas se debe gestionar una mayor cantidad de elementos. Para manejar tal nivel de complejidad, es necesario que los equipos cuenten con una solución automatizada basada en las políticas que determine la forma y el lugar de ejecución de los contenedores. Kubernetes, la plataforma ampliable y open source de organización de contenedores, se diseñó para encargarse de estos desafíos.
Red Hat® OpenShift® es una plataforma empresarial de Kubernetes para la nube híbrida que posee funciones integrales y características que los desarrolladores pueden utilizar con facilidad. Si bien el kernel de Kubernetes es el elemento fundamental de Red Hat OpenShift, no basta para ejecutar las aplicaciones en contenedores en un entorno de sistemas distribuidos.
Las ventajas de Kubernetes
La implementación y el mantenimiento adecuados de Kubernetes permiten que los equipos de operaciones de TI, los desarrolladores y los dueños de las empresas aprovechen sus excelentes características:
Capacidad de ajuste
Kubernetes puede ejecutarse en una máquina local o en varios clústeres en zonas de disponibilidad generalizadas. Agrega o quita recursos según sea necesario para ajustar la capacidad del clúster.
Portabilidad de las cargas de trabajo
Kubernetes se ejecuta tanto en el centro de datos local como en las nubes pública o híbrida, y siempre implementa los contenedores de la misma manera.
División de intereses
Mientras los equipos de operaciones valoran la estabilidad, los desarrolladores se preocupan por la velocidad. Kubernetes pone fin a este conflicto, de manera que las empresas puedan centrarse en lo que realmente desean: generar innovaciones y crecer.
Desafíos de Kubernetes empresarial
Es más sencillo hablar sobre la instalación, la implementación y la gestión de Kubernetes que efectivamente llevar a cabo estas tareas. De hecho, el 75 % de los usuarios menciona que no la utilizan en la producción por ese motivo. A la hora de evaluar si utilizarán esta plataforma o no, las empresas deben tener en cuenta la seguridad, la arquitectura multiempresa y la integración con las inversiones actuales.
Esto presenta varios desafíos en torno a la gestión del ciclo de vida:
Instalación
Durante el proceso de instalación de Kubernetes, el equipo de TI tiene que validar los hosts con las configuraciones adecuadas y el sistema operativo Linux®.
Implementación
A medida que se implementa la plataforma, es preciso brindar la identidad y el acceso de seguridad adecuados, además de las integraciones para el almacenamiento, las redes y las soluciones de registro de contenedores.
Refuerzo
Luego de implementarla, se la debe integrar con otras soluciones, como las que se utilizan para supervisar la plataforma, reforzar la seguridad y generar registros. Las empresas que cuentan con muchos equipos deben asegurarse de segmentar los recursos de forma adecuada y de configurar las soluciones de medición y reembolso correctamente.
Operaciones
Una vez que Kubernetes esté en funcionamiento, será necesario actualizar y aplicar parches permanentemente en todas las capas de la stack, como el host del contenedor de Linux, la plataforma en sí y los servicios que se ejecutan en ella.
Elementos que no están incluidos en Kubernetes
Si bien Kubernetes es un proyecto sólido que ofrece grandes beneficios para las empresas, no se trata de una solución lista para usarse. Por eso, se debe combinar con otras herramientas. No solo exige un esfuerzo importante para establecer las funciones, los controles de acceso y las políticas de la arquitectura multiempresa, sino que también carece de:
Herramientas para los desarrolladores y servicios para las aplicaciones
Kubernetes no incluye soluciones probadas ni validadas de bases de datos, middleware o supervisión del rendimiento. Por esa razón, se deben tomar otras medidas para garantizar que funcione con editores, entornos de desarrollo integrado (IDE) y marcos de prueba específicos.
Flujos de trabajo de DevOps
La plataforma no incluye flujos de trabajo de integración y distribución continuas (CI/CD) ni procesos de diseño y actualización de los contenedores.
Sistema operativo, almacenamiento y redes
Estas tecnologías no se incluyen de fábrica con Kubernetes, a pesar de que son fundamentales para ejecutar los contenedores en la producción. Los usuarios deben adoptar e integrar sus propias soluciones.
Red Hat es el líder en la tecnología de open source
Red Hat es uno de los colaboradores principales de Kubernetes, y ha diseñado funciones y elementos clave del proyecto open source. Desde hace varios años, ofrece Red Hat® OpenShift® para respaldar a los clientes que ejecutan los contenedores en la producción con Kubernetes.No obstante,
Red Hat OpenShift no se limita a Kubernetes. Todas las versiones incluyen correcciones de seguridad, rendimiento y errores; integraciones validadas y probadas para los complementos de terceros y respaldo para el ciclo de vida de la empresa. Se ejecuta en cualquier entorno compatible con Red Hat Enterprise Linux, ya sea en las instalaciones o en la nube pública, e incluye actualizaciones que se implementan en todo el clúster con tan solo apretar un botón, desde el sistema operativo hasta el resto de los elementos.